Esta viñeta volviéndola otra vez a ver, la verdad es que da que pensar. Un ejercicio maravilloso seria que la vida nos pudiera colocar una semana en el lugar de nuestros contrarios (todos tenemos). Por ejemplo, un multimillonario por un hambriento del cuerno de África, Obama por Ahmadineyad, etc. Cosas así. Seguro que la ética genérica mundial cambiaría y nos entenderíamos más todos, porque entenderíamos a los demás, o por lo menos haríamos las cosas conocedores del resto.
Porque en las altas esferas, una foto es una foto y la realidad es bien distinta.
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